¡Que la libertad os haga fuertes!
Iciar Irurtia Orzaiz
Sabias, independientes y felices. Curiosas, divertidas y estudiosas. Y que seáis lo que queréis ser. Así se despidió Sophie Germaine -a la que da vida la actriz Naiara Azpilkueta – en las funciones de este pasado fin de semana, La teoría de Sophie . En Úcar, Obanos y Desojo la historia vital de la matemática francesa fue la protagonista de la programación Kul, la que acerca la cultura al corazón del pueblo. Y en ella, la puentesina Azpilkueta dio vida a esa mujer valiente que luchó por sus ideales. La que cambió la falda por los pantalones, recogió su cabello y se sumergió en los libros. Esa joven curiosa que nunca dejó de preguntarse el por qué de las cosas. Acompañada por la música en directo del violín de Daniel Menéndez , músico afincado en Obanos, Sophie contó su historia a jóvenes, mayores, niños y niñas.

El primer fin de semana de agosto, la programación de Kul, cultura en el corazón del pueblo presentó La teoría de Sophie , una obra escrita y dirigida por Maite Redin y producida por Tdiferencia , que cuenta la historia de Sophie Germaine (París, 1776-1831), la matemática y física francesa que cambió de identidad -Antoine Auguste Leblanc- para poder estudiar. Autodidacta, hizo destacados descubrimientos en teoría de números, física matemática, acústica y elasticidad. El montaje de la compañía navarra cuenta, en primera persona, la historia de esta adelantada a su tiempo -aderezada con la música en directo del violín de Daniel Menéndez- que fue capaz de cambiar de identidad para cumplir su sueño: estudiar. Algo que en aquella época era «cosa de hombres» y que, aún hoy en algunos lugares, no es accesible a todas las niñas. Una historia para disfrutar y sacudir conciencias. Para aprender, reflexionar y poner en valor la presencia de la mujer en la ciencia. «¡ Que nadie os diga que hay cosas de chicos y cosas de chicas! Los chicos tenéis derecho a ser lo que queráis de mayore. Se necesitan chicos enfermeros, cuidadores chicos, maestros de primaria y preescolar, chicos pediatras y chicas ingenieras, matemáticas, electricistas, mecánicas… Creo que el mundo funcionará mucho mejor cuando eso pase».




